Un mosquito de fábula

En su historia de los primeros pueblos de México cuenta Don Fernando de Alva Ixtlilxochitl la anécdota fabulosa de un mínimo insecto que cumple una labor extraordinaria, de magnitudes siderales y mitológicas:

 

       ". . . tienen allá en su historia que el sol se detuvo un día natural sin moverse de un lugar, y            añaden una fábula diciendo, que como el mosquito vido el sol tan suspenso y pensativo le dijo: Señor del mundo ¿por qué estás tan suspenso y pensativo y no haces tu oficio como se te ha mandado?¿que quieres destruir al mundo como sueles? y otras muchas palabras fabulosas; y viendo el mosquito que estaba quedo y no le respondía, llegó y le picó en una pierna, y hallándose picado tornó de nuevo á mudar su curso como suele"(Obras históricas de Don Fernando de Alva Ixtlilxochitl, 13).